Soy Mandarino
Quiero compartirles mi pequeña historia que forma parte del corazón de nuestro hotel.
Hace un tiempo, durante las fuertes lluvias, un pequeño gato color naranja apareció entre los jardines buscando refugio. Estaba asustado, empapado y sin rumbo. Nuestro equipo de recepción lo recibió con cariño, le dio comida, un lugar seguro y, poco a poco, Mandarino —como lo bautizamos— encontró aquí su nuevo hogar. 🧡🐱
Hoy, Mandarino es parte de nuestra familia y le encanta convivir con los huéspedes. Es un gatito noble, lleno de ternura, y disfruta muchísimo de las caricias y los apapachos. Si lo ven paseando por los pasillos o descansando en algún rincón soleado, siéntanse en confianza de saludarlo: su ronroneo es su manera favorita de dar la bienvenida.
Gracias por ser parte de esta historia y por permitirnos compartir con ustedes la magia que hace especial a este lugar.
¡Que su estancia sea acogedora, tranquila y llena de momentos inolvidables!